Arrancó con bombo y platillo la Leagues Cup 2023, este singular enfrentamiento entre ligas de Estados Unidos y de México, cuyo fin tiene dos aristas interesantes y dignas de comentarse.
Uno de los cometidos de este proyecto futbolero es el comercial, buscando aprovechar la presencia de paisanos en la Unión Americana para captar ingresos a través de este jueguito llamado futbol.
Otro de los objetivos y que debe ser el más importante, es el relativo a medir la capacidad futbolística entre ambas entidades deportivas, pues desde hace mucho tiempo se habla del progreso de la MLS de la que realmente tengo mis dudas.
Y es que si bien es cierto, a nivel de selecciones México ha sido superado por Estados Unidos, a nivel de clubes creo que los mexicanos siguen teniendo una superioridad importante y comprobada, medible con la incursión al Campeonato Mundial de Clubes.
A propósito del inicio de estas contiendas entre equipos de la MLS y Liga Mx, el gran aparato publicitario estadounidense puso en el aparador a Lionel Messi y le funcionó.
La presentación para el argentino con el Inter de Miami no pudo ser mejor, con gol y triunfo contra Cruz Azul y doblete y triunfo ante el Atlanta United, ingrediente que ya le dio lo que necesitaba esta contienda.
Si bien en los partidos entre ambas ligas ha habido paridad de fuerzas, estoy cierto que en las rondas definitivas los clubes mexicanos acabarán levantando la mano.
Mikel Arriola, presidente de la Liga MX, habló de algunas otras bondades que ofrece esta singular medición entre ambas ligas, entre las que se encuentra la exposición de jugadores y proyectar a ambas ligas a nivel universal.
Aún y cuando no hay equipo de futbol profesional, el tema de Tiburones Rojos causa controversia en nacional e internacional.
Hace unos días se escuchó la voz del empresario Carlos Bremer asegurar que el estadio Luis Pirata Fuente estaba vetado por el futbol organizado de FIFA.
Después Fidel Kuri, quien al salir de prisión parece recuperar credibilidad ante la opinión pública, aseguró que lo dicho por Bremer es incorrecto.
Más bien, eso lo digo yo, lo que está vetada es la plaza de Veracruz, es decir, la entidad como tal para tener equipo profesional de Liga Mx, no el estadio.
Aunque lo que busca el gobierno es que cuando esté el estadio listo en el 2024, se habilite un equipo de Liga de Expansión.
Y si bien la propia FIFA niega veto al Pirata Fuente, de acuerdo a la versión del vocero de prensa a través del Fantasma, es un hecho que posiblemente el organismo internacional no tenga etiquetado a Veracruz, pero de la FMF no me atrevería a asegurarlo, ya que el primero es muy respetuoso de las decisiones de sus agremiados.
El Águila de Veracruz logró su calificación a la postemporada gracias a un resultado alterno, el de Pericos sobre Guerreros. Sea como sea el objetivo no debiera ser menos que esto.
En la presente gestión se ha calificado de manera consecutiva a playoffs por tercer año y eso se aplaude, pero es apenas el primer escollo en un camino que debiera estar proyectado a la gran final, pues en base a la celebración del 120 aniversario de la franquicia se supone que se echó la casa por la ventana.
El trayecto no ha sido fácil y tampoco nadie esperaba que lo fuera y nos consta que la directiva se mantiene firme en sus objetivos, prueba de ello han sido los constantes movimientos en el roster, incluido el manejador principal.
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