El día de ayer ocurrió lo esperado, no hubo sorpresas, fue Claudia Sheinbaum la ungida como candidata a la presidencia de la república. Aquello en palabras de Marcelo Ebrard y miles de morenistas, fue un fraude, todo estaba armado para que fuera ella, desde un principio y Adán Augusto lo sabía, quien ayer se postró al lado de Claudia en señal de aceptación del proceso y los resultados que dieron la victoria.
En tanto el excanciller Marcelo Ebrard digno y con la cabeza en alto adelantó que el lunes dar una respuesta de cual será su actuar frente al “triunfo” de Claudia. Destacó el hecho de que el 14.4% de las urnas (31) fueran anuladas, lo cual dijo pone en tela de juicio la integridad del proceso, debido a que éstas no estaban selladas o no contaron con supervisión.
Aunque Ebrard no quiso utilizar la palabra fraude, si precisó que existen muchos elementos que muestran las irregularidades presentadas en el proceso de su partido entre las que destacó también el hecho de que no se le haya permitido el acceso a su equipo de trabajo al WTC de Ciudad de México donde se celebro el conteo.
Algo dejo en claro Marcelo y es que las irregularidades fueron muchas por lo que lo democrático y correcto sería que se reponga el proceso de la encuesta mediante la cual se determinó que Claudia será quien encabece los trabajos de ese partido político para llegar a la Presidencia en 2024. El lunes habrá una respuesta definitiva a decir del excanciller.
Por su parte Claudia Sheinbaum, la ahora coordinadora de la defensa de la 4, es decir la candidata presidencial de Morena. A decir de Claudia, es candidata del pueblo, lo cual evidentemente no es una realidad, pues millones de mexicanos desconocen su llegada y más aún lamentan sea la encargada de continuar con el legado de López Obrador, quien lucho toda su vida para ello, mientras que a ella nada le ha costado, motivo por el cual auguran sería una malísima presidenta.
Por ahora Claudia dijo que habrá presidenta de la república en 2024.E n un salón del World Trade Center, sus simpatizantes coreaban “¡presidenta, presidenta!”, mientras que a lo lejos de escuchaban abucheos de los pocos morenistas que lograron acceder y que no simpatizan con ella, pues como bien lo dijo Marcelo, se le negó el acceso a su equipo.
Sheinbaum Pardo -ya con aires presidenciales- convocó a una reunión inmediata pues dijo es urgente preparar la elección presidencial, “porque no hay un minuto que perder” y en clara referencia al excanciller, dijo, que “las puertas siempre estarán abiertas, nunca se van a cerrar”. Obviamente agradeció a los otros aspirantes, Adán Augusto López Hernández, Ricardo Monreal, Gerardo Fernández Noroña y Manuel Velasco, quienes reconocieron los resultados que la colocaron como candidata.
Cierto es que no hay novedad en los resultados del miércoles ya caída la noche, pues la llegada de Claudia era una realidad y se habla de que Morena retoma las mismas practicas amañadas de esos partidos políticos que tanto criticaron. Por cierto, que, en Veracruz, nos cuentan nuestros amigos, que el “Gobernante” Cuitlahuac García, celebró -absurdamente- desde palacio de gobierno la imposición de Claudia, pues aseguran que éste habría ya negociado la secretaria de Educación Pública en su favor.
Y nos aseguran que quienes no están nada contentos son los veracruzanos y más aún los burócratas quienes han sido obligados a respaldar a Claudia, pero además destinar su quincena para las movilizaciones y eventos en respaldo de la ahora candidata, hecho que auguran continuara en total abuso de poder. ¡Así la realidad de México, de Morena y su endeble democracia!
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