Los trabajadores de volante no reportan daños a los vehículos en esta temporada porque cortan el servicio si empieza a llover, para evitar cualquier avería o descompostura, afirmó Guillermo Larios Barrios, representante de un sector de taxistas en la ciudad de Veracruz.
Explicó que las experiencias de choferes de otros servicios de alquiler llevaron a tomar esa determinación.
“En temporada de lluvias nos va bien porque la gente llama mucho al transporte de taxi; el problema son las condiciones de las vialidades, que están terriblemente mal; luego, el tipo de precipitaciones, que son torrenciales y se inunda como nunca antes la ciudad.
“Eso genera parálisis del servicio: se deja de prestar el servicio por seguridad del usuario del conductor y del propio automóvil; apenas se nubla y empieza a lloviznar interrumpen el servicio y guardan el automóvil”, señaló Larios Barrios.
Admitió que en temporada de lluvias les va bien porque la gente usa mucho al transporte de taxi.
Recalcó que los choferes de la central de taxis no tienen reportes porque están conscientes de que en esas circunstancias deben parar y retirarse a casa para estar seguros.
“Las vialidades no ofrecen las garantías de una conducción segura; cortamos, a la hora que haya precipitaciones se para el servicio”, dejó en claro Larios Barrios.
Cabe señalar que la noche del jueves 27 de septiembre, a las 7:00 de la noche comenzó a llover y desde ese momento dejaron de salir hacia el centro varias rutas del transporte público, como Panteón Jardín, Calle 12, Infonavit Chivería, Alcocer, Bajadas, Ortiz Rubio, Dos Caminos, y muchas más.
Avenidas como Allende y Miguel Alemán se convirtieron en ríos que arrastraban bolsas de basura.
Centenares de personas abarrotaron avenidas como Díaz Mirón, Allende, Miguel Alemán, Cuauhtémoc, Miguel Ángel de Quevedo o Circunvalación.
Y los taxis que pasaban no levantaban pasaje.
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