Se acabó la veda del pulpo en Veracruz, pescadores reactivan su extracción

Los pulperos ya retomaron la pesca de esta especie en las costas de Veracruz después de la suspensión temporal de dos meses, tal como lo marcó la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA) y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.

La veda del pulpo se registró desde el pasado lunes 1 de enero al 29 de febrero de 2024, en ese lapso se prohibió su captura para evitar la devastación de la especie y permitir su reproducción y subsistencia.

El pulpo en el estado de Veracruz se encuentra actualmente activo el periodo de veda, específicamente en las aguas de la jurisdicción federal del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano, el cual cuenta con una superficie de 65 mil 516 hectáreas integrado por al menos 28 arrecifes.

Este Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano se encuentra ubicado frente a los municipios de la zona conurbada Veracruz – Boca del Río y Antón Lizardo.

De acuerdo con lo establecido por la Conapesca y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, la veda del pulpo inició desde las 00:00 horas del 1 de enero del 2024 y terminó el pasado 29 de febrero, por lo que los pescadores ya pueden extraer esta especie para su consumo y venta.

Se levanta la veda en las costas de Veracruz.

¿Cuáles son los beneficios de las vedas?

• Proteger y administrar áreas de importancia para el ciclo vital de especies económicamente significativas.
• Salvaguardar los sistemas marinos y estuarinos para asegurar su viabilidad a largo plazo y para mantener la diversidad genética.
• Proteger las especies y poblaciones reducidas, amenazadas o en peligro de extinción, y en particular, conservar los hábitats considerados críticos para la supervivencia de dichas especies.
• Resguardar las áreas marinas protegidas de los efectos adversos de las actividades externas.
• Facilitar la interpretación de los sistemas marinos y estuarinos para los fines de conservación, educación y turismo.
• Velar por la investigación, la capacitación y el seguimiento de los efectos ambientales de las actividades humanas, incluidos los efectos directos e indirectos del desarrollo y de las prácticas de uso de los terrenos adyacentes.