Diariamente miles de mujeres cruzan fronteras en todo en el mundo, la gran mayoría va acompañada de sus hijos, quienes, al igual que ellas, están expuestos a la violencia y a toda clase de agresiones en su trayecto que afrontan calladas, pues la gran mayoría desconoce los derechos que tienen en cualquier país, aseguró la licenciada Zelfa Álvarez Olivier, especialista en derecho migratorio.
“Una de las principales causas por las que muchas mujeres deciden aventurarse a vivir el sueño americano es la violencia que viven en su país de origen, lo que hace que emigren al país vecino del norte, las mujeres de Centroamérica cruzan por México, sin embargo, al llegar a nuestro país se enfrentan a redes criminales, trata de personas, desapariciones forzosas, secuestro, abusos sexuales y acoso, lo que amenaza su seguridad y la de sus pequeños hijos mientras recorren el territorio mexicano”, manifestó.
Son muy pocas las mujeres que buscan apoyo de las autoridades migratorias en nuestro país, porque desconocen sus derechos, agregó.
“Yo invito a las mujeres que estén en esta situación a que se acerquen a la Fiscalía de Migrantes, a denunciar y soliciten la visa de razones humanitarias antes el Instituto Nacional de Migración, un documento al que pueden acceder”, subrayó.
Añadió que las mujeres embarazadas y que dan a luz en territorio mexicano deben de acudir el consulado de su país e incluso obtener la residencia permanente en México.
“Si una mujer migrante llega a da a luz en territorio mexicano, tiene derecho a registrar a su hijo en nuestro país, por lo que es recomendable que busquen apoyo de su consulado, si requieren documentos que acrediten su nacionalidad y presentarse ante el Instituto Nacional de Migración a solicitar la residencia permanente”, aseguró.
Lamentó que aún queda un largo camino por recorrer en la lucha de la igualdad jurídica entre hombres y mujeres, sin embargo, dijo que es necesario asesorarse, indagar y sobre todo, conocer los derechos que se tienen, ante cualquier circunstancia.
Recordó que, de acuerdo a la Comisión Americana de los Derechos Humanos, toda mujer en migración tiene derecho al libre tránsito y residencia.
“Se reconoce la libertad de tránsito como la facultad que tiene todo individuo de entrar y salir del país libremente de su territorio o de cualquier otro y mudar de residencia sin necesitar carta de seguridad, pasaporte u otros requisitos semejantes.
"El ejercicio de este derecho estará condicionado conforme a las facultades de cualquier autoridad judicial o administrativa, en casos de responsabilidad penal, civil y administrativa por lo que hace a las limitaciones que dicten las leyes sobre migración y salud”, concluyó.
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