La actividad pesquera en el municipio de Boca del Río se ha visto gravemente afectada debido al oleaje elevado generado por los huracanes que han impactado en el Golfo de México.
De acuerdo con el presidente de la Federación de Pescadores de Boca del Río, Margarito Enríquez Luna, la pesca ha disminuido hasta un 80 por ciento debido a las difíciles condiciones para salir a pescar.
“Con los tiempos que pasaron de todo lo que sucedió con los huracanes que han pasado, aquí nos llega el remanente de todo lo es el oleaje […] no nos deja trabajar, apenas hoy salieron los compañeros y empezaron a capturar un poquito ya”.
Además de los huracanes, los eventos de “norte”, característicos de la temporada invernal, también complican la situación. Señaló que estos fenómenos provocan olas de entre 3 y 4 metros, impidiendo el acceso al mar.
“Ya tenemos la temporada de norte aquí […] al levantar oleaje de 3 o 4 metros no nos deja salir a nosotros la desembocadura, aparte de que está ensolvada, menos salimos con esos oleajes”.
Durante la temporada de nortes, que se extiende hasta marzo, los pescadores pueden pasar hasta 10 días sin poder trabajar debido a las restricciones impuestas cuando el Puerto es cerrado por motivos de seguridad.
Esta situación ha llevado a muchos a buscar otras formas de empleo temporal para mantener a sus familias.
“Lo que es el área de afuera del mar no podemos trabajar, nos cierran el Puerto y definitivamente tenemos prohibido, entonces muchos compañeros buscan otros trabajitos para irla pasando”.
Finalmente, detalló que la combinación de huracanes y eventos de norte representa un reto constante para los pescadores de la región, quienes enfrentan cada año la incertidumbre de poder realizar su actividad.
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