Durante las últimas semanas el precio del pollo a publico se incrementó 15 pesos por kilo, afirmó Doña Trini, propietaria de una pollería de los mercados de la ciudad de Veracruz.
Señaló que el kilo de pollo cuesta 58 pesos con menudencia y 80 pesos la pura pechuga, sin embargo, no disminuyó la venta.
“Anteriormente lo teníamos en 45 o 50 pesos según el precio que nos daban, ahorita compran la mitad de un pollo, según por el precio, lo que más compran es pierna con muslo, patitas, mollejas, para hacer una sopa”.
Confirmó que el costo del producto seguirá encareciendo, pero al ser un producto solicitado, la población adquiere menos piezas.
Insistió en que el producto seguirá encareciendo debido a la temporada de calor, sin embargo, confió en que las ventas no disminuyan de forma significativa.
“Ahorita por los calores sube más el precio, comúnmente en los meses el mayo y junio sube mas el precio, yo creo que el precio se va a quedar ahorita como está, uno sigue vendiendo para no dejar a los clientes sin pollo”.
El pollo es una excelente fuente de proteínas de alta calidad, esencial para la construcción y reparación de tejidos del cuerpo. Además, es una fuente de nutrientes como vitaminas del grupo B (especialmente B3 y B6), minerales como el fósforo y el zinc, y aminoácidos esenciales que nuestro cuerpo necesita para funcionar correctamente.
Comer pollo de forma regular puede ayudar a mantener la masa muscular, fortalecer el sistema inmunológico, y contribuir a la salud ósea y dental debido a su contenido en calcio y fósforo. Además, el pollo es una opción más magra en comparación con otras carnes rojas, lo que lo convierte en una alternativa más saludable para mantener niveles saludables de colesterol y grasas saturadas en la dieta.
La versatilidad del pollo en la cocina permite una amplia variedad de preparaciones saludables, desde asados, a la plancha, al horno o en ensaladas, lo que facilita su inclusión en una dieta equilibrada y variada.
Sin embargo, es importante recordar que la forma de preparación del pollo puede influir en su valor nutricional. Optar por métodos de cocción saludables, como cocinar al vapor, asar o hervir, en lugar de freír, puede ayudar a mantener los beneficios nutricionales del pollo sin añadir grasas innecesarias.
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