Adquirir un árbol de Navidad en esta temporada implica gastar al menos mil pesos si es pequeño y varios miles si es grande, pero no es lo mismo adquirir uno artificial que uno natural, porque la diferencia se mide en cientos de pesos, y eso en la zona de mercados, donde se supone estarían mas baratos.
En alrededores del Mercado Miguel Hidalgo se ven pocos ejemplares a la venta, la mayoría artificiales, pues al decir de “José”, quien dijo no poder hablar más por no ser el dueño del negocio, los artificiales son más caros y las personas no los llevan.
Ahí el tamaño promedio es de 80 centímetros a un metro, y son de plástico, pues aducen que los naturales tienen poca demanda y antes de que termine diciembre ya están en avanzado proceso de desecación.
El costo promedio de un árbol navideño de plástico oscila entre 250 a 450 pesos, aunque había uno de 3 mil 700 pesos, de un metro y medio de altura, afuera de un comercio establecido.
En otro punto de la zona de mercados, afuera del estacionamiento al aire libre ubicado en la avenida Guerrero entre Juan Soto y Hernán Cortés, así como en sus alrededores, la oferta es de árboles naturales y por lo tanto, desechables.
Éstos provienen de tierras frías en la zona central y montañosa del estado de Veracruz y sus costos son más altos que los artificiales.
Por ejemplo, un árbol natural traído de otro municipio y con una altura promedio de 1.20 metros cuesta mil 200 pesos; pero uno más grande, con una medida de aproximadamente 1.40 a 1.50 metros supera los 2 mil pesos.
El riesgo para los vendedores de árboles naturales es que al paso de los días se deterioran y dejan de venderse, lo que se convierte en pérdidas económicas porque no se recupera la inversión que hicieron.
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