Es impostergable un freno a la anarquía, abusos y falta de transparencia en el servicio de parquímetros en la ciudad de Veracruz, urgió el diputado federal Julio Carranza Areas.
Admitió que es prácticamente imposible sacarlos de Veracruz porque quiérase o no, son necesarios para controlar la movilidad vehicular, pero recalcó que se debe poner orden en su operación y rendir cuentas, porque nadie sabe cuánto ingresa por multas ni qué se hace con ese dinero y se debe revisar la concesión para esclarecer el monto de multas y la comprobación fiscal del cobro.
Reconoció que en las principales ciudades del mundo y de México el esquema de cobro por estacionamiento en las calles ha servido para regular y controlar el tránsito vehicular.
"Sin embargo, en Veracruz desde que el exalcalde Julen Rementería del Puerto otorgó la concesión a Zeus Monitoreo Vial, el sistema ha operado con arbitrariedad y opacidad en los ingresos que se deben destinar al Fideicomiso del Centro Histórico", puntualizó Carranza Areas.
Añadió que en Veracruz el cobro de los parquímetros no está sujeto a comprobación fiscal, mientras que las tarifas de multas se basan en decisiones arbitrarias.
"Es de todos conocido que los parquímetros se han convertido en la caja chica para los presidentes municipales en turno, por lo que es necesaria una investigación profunda, es decir una revisión a la concesión en cuanto el cobro por estacionamiento en la vía pública y esclarecer en qué se han invertido los recursos obtenidos por el ayuntamiento", puntualizó el diputado federal veracruzano.
Carranza Areas dijo que está documentando una serie de irregularidades, denuncias y violaciones a la ley y a derechos humanos por los abusos en los cobros que realiza la empresa Zeus.
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