¿Qué onda mi raza? Ya llegó su mero, mero, Justiciero, para pedirle a las autoridades que ya le hagan justicia a este hoyo que se encuentra en la calle Campero esquina con el callejón Cantarel, justo enfrente a una escuela primaria, y por donde pasan todos los días mis compás y comadritas con sus chilpayates y quienes, de puro milagro, no se han ido al hoyo.
Me cae que este hoyote ya tiene un buen, me dijeron los vecinos que hasta piensan hacerle un fiestón a ver si las autoridades voltean a verlo.
De por sí las banquetas de las colonias, como la 21 de Abril, donde se encuentra este y otros agujeros, están bien coarteadas, con el pavimentado levantado y tan endeble, que hace un par de meses una niña se hundió al pisar por la banqueta, por fortuna no tuvo mayores consecuencias pero no quiero que mis compas se vayan a dar en toditita la estampa con este otro hoyo, pues ya saben que en Veracruz, en cuestión de hoyos, somos los meros, meros.
Así que a las autoridades correspondientes, por fas ahí les encargo este, y ojalá que no me salgan como les han dicho a los vecinos que se han cansado de reportar y reportar, que no les corresponde, que es con MAS, será con más, pero con más ganas de trabajar para que le echen montón y lo tapen o le pongan su enrejado o lo que haga falta para que nadie dé un mal paso y se vaya al hoyo.
La neta se siente bien gacho, piensas que pisas firme y sácatelas, te vas liso, sin topes, ni freno que te pueda parar.
Bueno, ahí se los dejo de tarea, ojalá y no vaya a ser requerido para partir el pastel que la flota ya está organizando para festejar el primer año de este huecote en la colonia 21 de Abril.
No se olviden de enviar a la línea justiciera sus reportes, nos vidrios en la próxima entrega.
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