Quihubo mis brothers preciosos, los saluda su carnalín del alma, y les cuento que ahora sí estoy enchilado, deveras mis cuates.
La gente irresponsable nunca piensa en los demás ni en el daño que puede causarles con su irresponsabilidad. Y voy al grano:
Desde hace tiempo allá en el fraccionamiento La Tampiquera hay un poste de la telefonía que anda como mis cuates los catarrines cuando se encuentran hasta las chanclas de lo alcoholizados.
Se ubica en la calle Minatitlán frente a una vivienda con el número 47, justo frente al parque del fraccionamiento y atrás de una iglesia.
Además de que si el poste de madera va a dar al piso dejará sin servicio telefónico y sin internet a los vecinos, podría causar un accidente de graves consecuencias.
¿Se imaginan si cae sobre un automóvil? ¿O sobre quienes vayan caminando? Las consecuencias podrían ser fatales.
Y como suele suceder, querrán tapar el pozo ya después de ahogado el niño. Pues no!!!
Señores de la compañía telefónica, pegar cinta amarilla con la leyenda PRECAUCIÓN no es suficiente para evitar un accidente.
El frente frío ya trajo los primeros vientos con rachas violentas. Conforme se acerque el invierno los nortes serán más violentos y peligrosos.
Eviten una desgracia ahora que están a tiempo, porque ese poste está igual de chueco y de inclinado que mis compañeros de borrachera, y en cualquier momento le meterá un buen susto a alguien.
Luego no digan que no lo advertimos. Más vale un grito a tiempo que mil a destiempo.
¿O no mis brothers del alma?
Pues a darle duro y tupido, señores. Háganlo por los niños y los adultos mayores, que son muy vulnerables.
He dicho, mi flota chelera. Síganme los briagos, digo, mis brothers del alma!!!
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