269 menores desaparecieron en Veracruz durante el gobierno de Cuitláhuac García

El Committee on the Rights of the Child de Naciones Unidas emitió un llamado al gobierno mexicano para tomar medidas inmediatas y más efectivas para prevenir, investigar y sancionar las desapariciones de niñas y niños, incluido los casos de desapariciones forzadas.

En el documento titulado Concluding observations on the combined sixth and seventh reports of Mexico, fue publicado por Naciones Unidas el pasado 16 de septiembre y sus resultados fueron entregados a autoridades.

En el estudio se reconoce que durante el actual gobierno existen avances en el combate de la violencia en contra de las infancias, pero también reconoce los renglones en los que se requiere redoblar esfuerzos y establecer protocolos o políticas públicas más eficaces.

En el caso de las desapariciones de menores de edad, el organismo advierte que actualmente las estadísticas muestran que diariamente se reporta la desaparición de 14 niñas y niños, es decir, uno cada dos horas.

En ese sentido, recomienda que el tema sea atendido con prioridad y de manera inmediata, ya que muchas veces la dilación en las búsquedas puede complicar las investigaciones para dar con el paradero de los menores desaparecidos.

“Dedicar el más alto nivel de prioridad y tomar medidas inmediatas y efectivas para prevenir, investigar y sancionar las desapariciones de niños, incluidas las desapariciones forzadas, asegurando la búsqueda inmediata, en particular eliminando el requisito de un período de espera de 72 horas en las leyes procesales”, detalla el informe.

Desapariciones de menores en Veracruz

Entre el 1 de diciembre del 2018 y el 19 de septiembre del 2024, es decir, durante el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, en el estado de Veracruz fueron reportados 2 mil 236 menores de entre 1 y 17 años como desaparecidos.

Las cifras fueron consultadas en el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y no Localizadas, de la Comisión Nacional de Búsqueda, por el periódico Imagen de Veracruz.

El organismo federal detalla que, del total de reportes de menores desaparecidos, mil 967 fueron reportados como localizados.

De los menores localizados, 19 de ellos fueron hallados sin vida, víctimas de homicidio o feminicidio. Sin embargo, 269 de los menores de edad que fueron reportados como desaparecidos todavía no han sido localizados y sus familiares continúan su búsqueda.

El pasado 30 de agosto, en el marco del Día Contra la Desaparición Forzada, madres de colectivos de búsqueda de personas desaparecidas afirmaron que durante el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez no se logró combatir la crisis humanitaria que existe por este tema, como se prometió al arranque de su gobierno.

Aunado a los casos que siguen presentándose, las víctimas no reciben un trato digno por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE) y las investigaciones avanzan con lentitud o simplemente no tienen seguimiento.

Casos de Poleth e Isidro

Los casos de Poleth e Isidro, de 11 y de 7 años, son dos de los más recientes ocurridos en Veracruz, relacionados con la desaparición de menores. Ambos fueron asesinados por sus captores y sus cuerpos abandonados en la vía pública.

La niña José Poleth Pérez Zepahua fue reportada como desaparecida en la ciudad de Orizaba el 8 de septiembre pasado y su cuerpo fue localizado cuatro días después en un terreno baldío ubicado en el mismo municipio.

Según lo relatado, la menor estaba al cuidado de su abuela que le dio permiso para jugar con una vecina, pero al llegar la tarde-noche ya no supo de ella. Por este caso, la Fiscalía General del Estado informó que se giró una orden de aprehensión en contra de un hombre que no ha sido capturado.

El caso del niño Isidro ocurrió el 13 de septiembre, un día después del hallazgo del cuerpo de Poleth. El menor fue privado de la libertad presuntamente por dos mujeres en una localidad de Alto Lucero y su cuerpo fue abandonado en un predio del municipio de Xalapa.

Dos mujeres fueron detenidas como probables responsables de su desaparición y homicidio, la principal línea de investigación apunta a represalias por un pleito que tenían con familiares del menor.