Taller Creativo de Gráfica Yanga impulsa labor artística en Atarazanas

Culminó con éxito el primer curso de grabado en relieve, ‘Estampa jarocha’, del Taller Creativo de Gráfica Yanga que alberga el Centro Cultural Atarazanas.

Alejandro Pérez Cruz, artista visual y gráfico que realizó esta primera instrucción, fue la mente detrás del espacio, el cual propuso alrededor de 2019 y que ya cuenta con dos activos, en Coatepec y Tlacotalpan. 

En este tercero, participaron diecisiete alumnos de todas las edades, que compartieron sus ideas a través de este arte y que, con cuya ejecución, dan continuidad al proyecto gráfico. 

“La idea creativa tiene que ver mucho con lo que es el entorno y ese entorno desarrollarlo en cada uno de estos sitios”, comentó Pérez Cruz en entrevista con Galería.

“Va de salida la gestión y pensé quee este último no se iba a realizar, pero estoy bastante agradecido que se logró y más en el puerto, eso hay que recalcarlo."

"Hay talleres, pero son particulaes y un espacio como tal, de esta magnitud, donde pueden estar participando más de quince personas, es muy interesante y muy bueno”, señaló.

- Además del interés en el arte, ¿cuál cree que fue el motivo por el que se inscribieron estos primeros alumnos?

- En buena parte creo que son inquietudes que tienen los atistas muy jóvenes, que se van desarrollando con el tiempo, pero no enuentran los espacios dónde desarrollarlos. Se agradece muchísimo a la Secretaría de Cultura de Veracruz que se difundiera ampliamente el taller, llegaron porque querían estar aquí y siguieron llegando más. 

Este es un espacio que se va a quedar y que a partir del próximo mes van a tener otro maestro que estará prácticamente todas las vacaciones, hasta agosto, y que les permitirá con más calma desarrollar un proyecto más particular, de sus imaginarios.

- ¿Qué integra este taller de gráfica?

- Normalmente necesita una prensa para imprimir cada plancha, le llamamos vulgarmente tórculo y es una roladora que te permite imprimir cada una de las placas que desarrollan.

Dejamos un equipo de varias tintas, material para prácticamente todo el resto del año, un par de máquinas, una manual y otra más mecánica y todo lo que se necesita en el taller; incluso hasta los propios solventes. Todo eso se trajo y al cien por ciento apoyados por la Secretaría de Cultura de Veracruz. 

- ¿Por qué nombrar ‘Yanga’ a este espacio?

- Su origen es de aquí, me lo nombraron y me pareció interesante; ya tenía la referencia, mi padre es veracruzano y el personaje me parece ideal, estamos hablando de la libertad de expresión creativa y el arte es eso.

Hablar de Yanga, un personaje de principios de 1600, que es cuando prácticamente se plantea una lucha de libertad para su pueblo, veinte años después lo logra y eso es un poco la idea.

Estos espacios se logran así, luchando y buscando plantear este tipo de cosas en el arte para que se puedan dar. 

Podemos tener museos, galerías para difundir eso, pero a veces no tenemos los espacios para desarrollarlo, solo nos traen las exposiciones y cuando podemos tener estos espacios es cuando se logra algo. 

Veracruz es rítmico, de música, baile, carnaval y a veces lo digo: cuando estoy dibujando, la expresión no es retener mi brazo o contenerlo, sino dejar que trace libremente y eso es bailar, dibujar, la propia escritura y si lo podemos colocar en una placa y luego comunicarlo con una imagen, perfecto. 

- ¿Cree que haya una nueva ola de artistas gráficos?

- Todo el país es un país de gráfica, pero creo que este eje que formamos de tres espacios en Veracruz va a crear un boom en la gráfica.

Nadamás aquí hubo diecisiete, entonces creo que los muchachos van a seguir desarrollando, exigir que se implememten más cursos y ya tienen el taller, que era lo que necesitaban. 

Aprovechen estos espacios de cultura, deben de continuar, no porque hay buena gestión ahí se acabó; hay que abordarlos, si son los padres, hay que traer a los hijos, si no son lo hijos hay que traer a los padres y siempre hay que tener este espacio con ese interés y desbordar su creatividad.