Abraza Jáltipan al Centro de Documentación del Son Jarocho

Viento en popa se encuentra el Centro de Documentación del Son Jarocho, ubicado en Jáltipan, Veracruz, que con el apoyo de la comunidad y la iniciativa de la cantautora Natalia Lafourcade, abrió las puertas de sus nuevas instalaciones el pasado 31 de marzo.

A casi tres meses de su inauguración y casi uno del inicio de sus actividades y talleres, el sitio se encuentra activo gracias a la instrucción musical, artesanal, gastronómica y cultural, de los que destaca el propio son jarocho, zapateado, requinto, marimba, entre otras ofertas.

“El evento de inauguración fue muy bonito, no estuvo planeado, todo lo dejamos a que fluyera de nuestros sentimientos y nuestro corazón”, comentó el maestro Ricardo Perry Guillen, director de Los Cojolites, quien conversó con Galería vía Zoom desde Jáltipan.

“Había mil personas dentro del centro y 350 sentadas, entonces tiene una capacidad grande y eso nos ayuda a planear”, agregó el músico, quien ofreció detalles de los proyectos del centro tras realizar con éxito su primera actividad, la vigésima edición del Seminario de Son Jarocho.

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Celebrado en la reserva Luna Negra, ubicada en la isla de Tacamichapan, el XX Seminario de Son Jarocho reunió a casi 200 personas, entre cuerpo docente y participantes, quienes recibieron talleres y conferencias con el objetivo de aprender y analizar la cultura, historia y desarrollo regional de Jáltipan.

El evento, celebrado del 1 al 9 de abril y que culminó con el Festival Luna Negra, donde participaron grupos como El Guapo, proveniente de Argentina, así como Flor de Uvero, Colectivo Carretoneros y Los Cojolites.

“Nos da gusto que es el proyecto de educación hacia el son jarocho más importante que hay ahora en nuestra música tradicional”, comentó el maestro Perry.

Señaló que el seminario no solo beneficia al centro, sino también a la zona, pues otorga trabajo a personal de talleres, cocina -encabezada por su madre Ana María Guillén- e incluso casas particulares, ya que hay personas que deciden hospedarse fuera de la reserva.

Bajo esta línea, de colaboración, es como busca continuar activo el centro, mismo que desde otras sedes realizaba la misma oferta tallerística y que cambió tanto en sitio como en magnitud, pues actualmente brinda atención de lunes a domingo con apertura para niños, adolescentes y adultos.

“La respuesta de la gente nos ha gustado mucho porque han llegado muchos a inscribirse y eso nos alivia el alma. Era un espacio necesario en nuestro pueblo y la región, para poder aprender y sobre todo crear comunidad, porque fundamentalmente es eso”, relató.

“La música de son jarocho que es para bailar tiene esa cualidad, de que crea comunidad, donde no existen ni partidos, ni religiones, ni nada, sino solo nosotros en nuestro espíritu."

"Eso ha hecho que también la gente se integre, incluso que los niños no solo aprendan a rasgar la jarana o a cantar o zapatear, sino que aprendan que venimos de una tradición muy lejana, de muchos siglos y que debemos de conservar nuestra historia, nuestra cultura, nuestro entorno”, afirmó.

Autogestión

Con la reactivación del centro, la “otra aventura” de este es su mantenimiento, aseguró Perry, quien resaltó que buscarán que se desarrolle a través de la autogestión.

“Estamos muy agradecidos con Natalia por haber hecho el llamado a muchos, apoyar y dirigir este proyecto de construcción, además porque no es cualquier cosa lo que construyeron, es toda una infraestructura acorde a las necesidades culturales que tenemos”, comentó.

“A mí me gustaría que las clases fueran gratis, pero debemos tener el dinero para pagarle a los maestros y resolverlo nosotros, creo que es lo más sano, porque eso hace que el interés sea genuino por nuestra cultura.”

En ese tenor, el maestro destacó que el centro se encuentra en proceso de acomodo, pues a la par de las ideas de autogestión, el recinto tiene reservado su espacio para biblioteca, estudio de grabación, así como cinco habitaciones con baño y servicios que permitirán el hospedaje de visitantes.

Proyección

Actualmente, el Centro de Documentación instruye, con sus talleres permanentes, solo a habitantes de la región.

Sin embargo, será en verano cuando implementen intensivos, como de comida tradicional, cine y fotografía, así como de instrucción musical, el cual será impartido por la mamá de Natalia Lafourcade, María del Carmen Silva, pianista y creadora del Método Macarsi de enseñanza musical para niños, el cual compartirá a través del recinto.

Al cuestionarle sobre si Natalia participará en algún taller próximamente, Ricardo Perry aseguró que “ella quiere estar presente en cuanto pueda”; sin embargo, realizará en 2024 un taller de interpretación.

“Es una persona que realmente está involucrada con nosotros, con el proyecto del son y está estudiando el son jarocho desde hace años. Creo que esto va a dar muchos frutos para todos, porque es una persona muy importante y en los eventos donde está, llegan miles.”

Finalmente, hizo un llamado a la gente a conocer el centro, el cual esperan para diciembre esté abierto a visitas guiadas: “También el llamado es que traigan a sus niños a aprender, porque es la herencia más fuerte que le podemos dejar a los pequeños, nuestra cultura”, concluyó.