El diputado local Marlon Ramírez Marín reconoció la valentía del gobernador Cuitláhuac García Jiménez de aceptar que hay una irregularidad en el caso de Araly; ahora lo importante es saber quién está detrás de ella y se ve beneficiado.
Señaló que, a la par, se debe exigir a la contralora general del Estado, Mercedes Santoyo Domínguez, que comience a dar resultados porque es evidente que su trabajo ha sido pésimo por no darse cuenta del tal situación o, peor aún, es cómplice.
Indicó que este hecho echa abajo el mensaje del Gobierno de Veracruz de que son honestos, pues resulta evidente que es un hecho documentado de corrupción.
Recordó que este asunto fue cuestionado desde el año 2021 a la Secretaría de Salud, en ese momento a cargo de Roberto Ramos Alor.
Dijo que es grave que al gobernador le mienta su equipo de colaboradores que primero le comentaron que era un homónimo, después se trataba de una representante legal y finalmente una prestanombres.
"Lo cierto es que se trata de una proveedora que fue beneficiada por algunos funcionarios estatales que le pidieron firmar . Y ahora lo importante es saber quién está detrás de esto", añadió.
Marlon Ramírez resaltó que debe investigarse ese asunto para sancionar a los responsables.
Señaló que el gobernador Cuitláhuac García Jiménez debe hacer cambios en su gobierno y poner a personas realmente preparadas y honestas, porque los actuales carecen de esas características.
De manera particular, el diputado local priista indicó que es evidente la complicidad de los contralores internos y de los directores internos.
Dijo que tales funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública, del DIF Estatal y sobre todo el de Salud, Jorge Sisniega, deben ser investigados y comparecer ante el Congreso local para aclarar esta situación.
"Que la contralora se ponga a hacer su trabajo, porque hasta hoy ha tolerado la corrupción y los contralores internos cómplices", agregó.
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