El fin de las pandemias

En días recientes circuló en los medios de comunicación una nota sobre la venta de mapaches por parte de un usuario de Facebook radicado aparentemente en Tezonapa, Veracruz, afortunadamente varios usuarios denunciaron esa publicación e instaron a las autoridades protectoras del medio ambiente a actuar en consecuencia. Otros usuarios (los menos) se mostraron interesados en adquirir uno de estos animalitos.

Tener animales silvestres, más allá de las leyes que lo prohíben, no debe ser una opción para nadie, la gente que se interesa por adquirirlos debe saber que no son animales domésticos por lo que nunca será del todo confiable convivir con ellos, no todos los veterinarios están capacitados o tienen las vacunas necesarias para que convivan sin trasmitir enfermedades a los humanos y pensar también en que detrás de esos animales hay cacerías furtivas donde los padres mueren y poco a poco las especies se van extinguiendo.

De acuerdo a Protección Animal Mundial (World Animal Protection) El G20, formado por 19 países y la Unión Europea, sostuvo una reunión a finales de noviembre y se ha comprometido a garantizar que las pandemias como COVID-19 nunca vuelvan a ocurrir al comprometerse a avanzar en la preparación, prevención, detección y respuesta ante una pandemia mundial y reconociendo la necesidad de términos y soluciones para abordar las deficiencias en la preparación y respuesta ante una pandemia mundial.

El acuerdo de los líderes del G20 es un primer paso hacia la reducción del riesgo de futuras enfermedades y pandemia de origen silvestre. Sin embargo, no llega a la acción urgente necesaria para poner fin al comercio mundial de vida silvestre, lo que aumenta el riesgo de transmisión de enfermedades de los animales silvestres a los humanos debido a la explotación y las condiciones crueles e inaceptables en las que los animales a menudo se ven obligados a vivir por ejemplo pasan mucho tiempo en jaulas pequeñas donde no pueden ejercitarse y adquieren enfermedades por nadar en sus orines y excremento.

En esa reunión los líderes no abordaron el comercio de vida silvestre, a pesar de que los Ministros de Agricultura del G20 reconocieron recientemente la necesidad de evaluar el vínculo entre el comercio de vida silvestre y las pandemias. Como menciona Protección Animal Mundial es vital una prohibición global del comercio de vida silvestre, incluida la prohibición del uso de la vida silvestre en el entretenimiento (circos con animales, nadar con delfines, entre otros), esté incluida en cualquier medida relacionada.

Como no se llegó todavía a un acuerdo mundial que prohíba en definitiva la venta de animales silvestres alrededor del mundo, Protección Animal Mundial lanzó una petición firmada por más de 1 millón de personas en todo el mundo, y una campaña, respaldada por expertos en vida silvestre líderes en el mundo, incluida Dame Jane Goodall, demostrando que existe un gran apoyo público para prohibir el comercio mundial de vida silvestre. Los líderes mundiales del G20 han demostrado que están escuchando, pero deben ir más allá para demostrar que se toman en serio la amenaza de futuras pandemias.

Italia será la sede de la Cumbre de Líderes del G20 en 2021, por lo que ahora esperamos que la Presidencia italiana reconozca que la salud humana y animal están estrechamente vinculadas, y para asegurar que el G20 tome los siguientes pasos cruciales para hacer una prohibición global del comercio de vida silvestre, una realidad en 2021.

El G20 es responsable de su promesa de prevenir futuras pandemias y esto requiere de la necesidad de establecer una prohibición global del comercio de vida silvestre. En nuestro estado y país hay leyes que prohíben el comercio de vida silvestre, se debe continuar aplicando estas leyes y sancionando a los traficantes de estas especies que ponen en peligro a nuestros ecosistemas y son detonantes potenciales de nuevas pandemias como ocurrió con el COVID. Toca a la ciudadanía tomar conciencia y no fomentar la compra de animales silvestres bajo ningún motivo. ¡Feliz 2021!