Son otros tiempos políticos los que se viven en Veracruz hacer a un lado al secretario de Gobernación Adán Augusto López por parte del gobernador Cuitláhuac García quien obliga a la burocracia estatal y municipal a rodear a la jefa de gobierno de la capital del país Claudia Sheinbaum, con el tiempo va a tener un elevado costo al olvidar la importancia de la investidura que tiene el número dos del gobierno federal en su reciente visita al estado de Veracruz. La madurez política del tabasqueño Adán Augusto López Hernández demuestra que importante saber perdonar, pero nunca lo va a olvidar.
Lo capitalizó el jefe del gobierno del interior del país para reunirse con los más representativas de los votantes más numerosos, lo que más causó extrañeza fue que los petroleros que supuestamente tienen como jefa superior a la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle le hicieron el feo y se fueron con Adán Augusto.
Se dice en los círculos del Palacio Nacional por el pleito cerrado que tiene con el director general de Pemex, el también tabasqueño Octavio Romero Oropeza, que al igual a los del sureste del país poseen la sangre caliente, lo mismo que el líder nacional del sindicato petrolero, el orizabeño de Ricardo Aldana, con todas las tablas de este complejo quehacer político, el alumno predilecto del millonario antecesor de Carlos Romero Deschamps, tomaron la decisión de incorporarse a la campaña de Adán Augusto.
El experimento político de las corcholatas presidenciales y las estatales en el estado de Veracruz, resultó muy interesante como se mueven los factores que van a decidir a través de una encuesta quienes deberán ser los abanderados de estos cargos. Por un lado, muy definidos el gobernador Cuitláhuac García Jiménez y los acarreados burócratas estatales y municipales y por el otro los líderes obreros-campesinos con sus respectivos sectores de trabajadores y agropecuarios que asisten porque ellos mismos quieren ya que son dueños de sus tierras y de sus ganados, como ocurriera en el municipio de Acayucan y en la cuenca del Papaloapan. Estos últimos muy orgullosos de contar con precios de garantía de sus productos y del ingenio más grande del país.
En el caso de los petroleros que acompañaron al secretario de Gobernación no se puede olvidar que fueron los primeros que se inclinaron por el candidato Cuauhtémoc Cárdenas que le costó la cárcel a su líder nacional Joaquín Hernández Galicia por el coraje que hiciera el candidato presidencial del PRI, Carlos Salinas de Gortari.
Es una primera prueba, pero falta mucho tiempo para llegar a diciembre donde tienen que renunciar a las secretarías respectivas y a la jefatura gubernamental capitalina.
En política todo puede suceder y nadie posee la varita mágica de predecir el futuro.
No hay que olvidar lo que pasó con Miguel Alemán que el favorito era el regente Casas Alemán y resultó su paisano Adolfo Ruiz Cortines, lo mismo ocurrió con el veracruzano cuando el favorito era el secretario de Gobernación el también veracruzano Ángel Carvajal y se fue con el del Trabajo Adolfo López Mateos y este último se fue con su compañero de viajes don José López Portillo.
La ventaja ahora es que ya no existen ni las Palabras Mayores del afamado periodista capitalino Luis Spota ni el dedazo de los mandatarios priistas, será ahora el pueblo de México y de Veracruz, el que pone y quita.
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